El comercio electrónico, e-commerce, consiste en la compra y venta de productos o servicios a través de internet.
Este tipo de comercio va ganando terreno al comercio convencional. Sus muchas ventajas hacen que cada vez más usuarios de internet se dispongan a realizar sus compras de forma online. Entre ellas podemos destacar que la tienda online abre las 24 horas del día los 365 días al año, la alta competitividad frente al comercio de a pie, conocer más a fondo al cliente teniendo la posibilidad de segmentarlo, pudiendo mejorar la comunicación con él y lanzando campañas especializadas para cada perfil de usuario.
La creciente demanda de este tipo de comercio ha hecho que las empresas estrujen sus cerebros para conseguir que el producto podamos tenerlo en nuestras manos lo antes posible. Actualmente en tan sólo 1 hora podrás disponer de tus productos, pero todo apunta a que podrá convertirse en minutos. ¿Dónde vamos a llegar?
La entrega de paquetería en minutos, de momento, existe como proyecto desde hace varios años en la empresa Amazon www.amazon.es, reyes de la logística y del comercio electrónico. Pero ya desde diciembre de 2016 existe un proyecto en desarrollo con el que se ha conseguido hacer realidad la entrega de paquetería por el aire, lo que ellos han llamado Prime Air, su proyecto de entrega a través de drones, 100% autónomo, pre-programado con las coordenadas de entrega y guiado por GPS. El envío se hizo real en Cambridge (Reino Unido) y con una duración de espera de tan sólo 13 minutos, todo ello en un escenario real pero en un entorno de prueba. En el mismo instante en el que un cliente confirma su pedido comienza a funcionar todo el proceso para la preparación y entrega. Este sistema está diseñado para realizar la entrega de los pedidos antes de 30 minutos después de haberse realizado la compra online, tiempo que fue sobrante para la entrega piloto, habiendo restado 17 minutos desde el último clic para la compra. Incluso dispone de un curioso sistema de autodestrucción para evitar que si un dron se cae dañe a la población civil.
Pese a todos estos avances en acortar la espera para la entrega de las compras electrónicas, aún estamos muy lejos de que este método llegue a operar de forma comercial. Todavía se deben solucionar problemas tan serios como la regulación de los drones en el espacio aéreo de los países en donde se quiere instaurar, sortear los múltiples obstáculos que se puede encontrar un dron en la ciudad e, incluso, durante su vuelo (aves), el reconocimiento de las superficies de la tierra, etc. Todo ello ha hecho que el proyecto no haya avanzado como se esperaba, llegando incluso a clasificarse como “disfuncional”.
Pero desde luego que si este método de entrega llega a ser algún día realidad, revolucionará, una vez más, el mundo del comercio electrónico.
